El Congreso colombiano expresó hoy su respaldo a la decisión del presidente del país, Juan Manuel Santos, de suspender temporalmente los diálogos de paz con la guerrilla de las Farc a raíz del secuestro de un general del Ejército y otras dos personas en el departamento del Chocó.
«Tiene el presidente todo el respaldo en una decisión dura y difícil como esta. Es el momento más difícil del proceso, que podría echarse a perder definitivamente y condenar a Colombia a continuar esta guerra», dijo a EFE el presidente de la Comisión de Paz del Senado, Roy Barreras.
Santos anunció en los primeros minutos de este lunes que el viaje de los negociadores del Gobierno a La Habana, previsto para hoy, fue suspendido por el secuestro ayer del general Rubén Darío Alzate, comandante de la Fuerza de Tarea Titán, una unidad especial de lucha contra la guerrilla, cuando estaba de civil y sin escoltas en la remota localidad de Las Mercedes tras hacer un recorrido por el río Atrato.
«Mañana viajaban los negociadores de paz a una nueva ronda de negociaciones en La Habana, les voy a decir a los negociadores que no viajen y que se suspende esta negociación hasta tanto no se aclare y se liberen estas personas, de manera que mañana no viajan los negociadores a La Habana», expresó el jefe de Estado.
El senador Barreras subrayó el compromiso de Santos con la búsqueda de una solución negociada a medio siglo de conflicto armado en Colombia pero subrayó que, al mismo tiempo, el jefe de Estado «tiene toda la firmeza suficiente para exigir la liberación inmediata de este general y de los soldados retenidos por las Farc».
Junto con el general Alzate fueron secuestrados el cabo primero Jorge Rodríguez y la abogada Gloria Urrego, coordinadora de proyectos especiales del Ejército para el Chocó, con quienes abordó una lancha para desplazarse por la zona selvática del Atrato la tarde del domingo.
Además de este secuestro, las Farc mantienen cautivos desde hace una semana a los soldados Paulo César Rivera Tapela y Andrés Díaz Franco, que cayeron en su poder tras un combate en una zona rural de Tame, en el departamento de Arauca, en la frontera este con Venezuela.
Barrera, que al igual que Santos es del Partido de La U, recordó que el diálogo de paz en Cuba, que pasado mañana cumplirá dos años, «se pactó desde el principio en medio del fuego» lo que implica riesgos como los que se viven hoy.
«Las Farc deben liberar inmediatamente al general y disminuir el tiempo de la negociación para evitar seguir corriendo riesgos como este», apuntó el senador Barreras a EFE.
Barreras también expresó su apoyo a Santos en su decisión de pedir al ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, y al mando militar, explicaciones sobre la violación de los protocolos de seguridad por parte del general Alzate al ir vestido de civil y sin protección a una zona llena de guerrilla.
«El general se metió en la boca del lobo. Es inexplicable», dijo el senador, quien añadió que las negociaciones de paz «no pueden echarse a perder por errores militares que pongan el riesgo el proceso».
El presidente del Senado, José David Name, también manifestó el «respaldo total al presidente y a las Fuerza Militares» en esta coyuntura que definió como «un momento tan difícil», en declaraciones a periodistas.
«Estamos pasando por un momento complicado, tenemos que rodear al señor presidente en su determinación de suspender los diálogos hasta la entrega del señor general», expresó Name, también del Partido de la U.
El senador pidió a las Farc que liberen al general y a los demás cautivos «inmediatamente» para poder «seguir construyendo la paz en Colombia».
«Que no se convierta este secuestro en un callejón sin salida donde el señor presidente no va a hacer algo distinto a suspender los diálogos», enfatizó Name.
